U M A Y U X

Sobre Nosotros

¿Qué es la Red Comunitaria para la Educación?

Información Relevante

¿Cuáles son los beneficiarios de esta iniciativa?

Hacia donde Vamos

Devolver el derecho a la educación de nuestros niños y niñas

Transparencia

Observa donde se dirigen tus recursos

Sobre Nosotros

UMAYUX es una marca de aplicación móvil que tiene como misión social la inclusión de las personas en la tecnología; y, también, la devolución del derecho a la educación a los niños y niñas de las zonas rurales de Ecuador que se vieron afectados por la irregularidad en el desarrollo de sus actividades escolares a causa de la pandemia.

El proyecto consiste en la construcción de una red inalámbrica local de acceso abierto con antenas de espectro libre (5.8GHz) y la implementación de un servidor de contenidos educativos (denominado “Chamilo” -código abierto-) para los alumnos de la Unidad Educativa "Eloy Alfaro" de la parroquia rural de San Blas, ubicada en el cantón Urcuqui provincia de Imbabura, Ecuador.

El total de alumnos que no cuentan con conectividad fija es del 80%, por lo que a partir del período de cuarentena no tuvieron la posibilidad de seguir estudiando regularmente, considerando que muchos de los docentes no viven en la localidad. Por otro lado, la cantidad de trabajos entregados por los estudiantes se redujo en un 90%. En tal virtud, la plataforma permitió a los docentes generar contenido guiado por el Ministerio de Educación para presentarlo a los estudiantes, sin conexión a Internet.

Información Relevante

Esta primera etapa ha contemplado llegar a 30 familias hasta marzo de 2021, beneficiando a más de 100 alumnos de la Escuela con el fin de apoyar la autoeducación de la conectividad. Cuando los maestros salen de la escuela después de clases, el Internet se enruta a través de la red para que los estudiantes tengan acceso a otros tipos de contenido

Miembros

Expertos en ideas innovadoras

Nuestros miembros y voluntarios están asociados con la investigación e implementación de redes inalámbricas!

Parte de esta iniciativa son:

Hacia donde Vamos

Esta pandemia reveló problemas asociados a las infraestructuras existentes para la prestación de servicios básicos y la garantía de derechos fundamentales como la educación y la salud. Por ejemplo, en el sistema de educación fiscal hay 1.039.470 estudiantes - 35% del universo total - que no tendrían acceso a Internet en casa, según datos del gobierno.

Escasez de conectividad

Ha reducido la entrega de la tarea en un 90% y la única forma de acceder a los recursos educativos es a través de los medios impresos que se entregan en la escuela. Esta primera etapa ha contemplado llegar a 30 familias hasta marzo de 2021, beneficiando a más de 100 alumnos de la Escuela con el fin de apoyar la autoatención de la conectividad. Cuando los maestros salen de la escuela después de clases, Internet se enruta a través de la red para que los estudiantes tengan acceso a otros tipos de contenido. El valor que pagarán las familias a partir de junio de 2021, será de unos $ 3 a $ 5 dólares que se utilizarán para cubrir el costo de más antenas para las nuevas familias que se sumen a la red

Además

El consumo medio de un alumno podría rondar los 2GB mensuales para desarrollar virtualmente su formación escolar. Por otro lado, en la parroquia rural de San Blas, ubicada en la provincia de Imbabura, Ecuador, se encuentra la Unidad Educativa "Eloy Alfaro". Esta escuela cuenta con aproximadamente 520 alumnos, de los cuales el 80% no tiene internet fijo en ca sa y el 20% restante tiene conectividad a través de planes o promociones de datos móviles en el segmento prepago

También

Estamos tratando de desarrollar un mecanismo de pago a través de mensajes USSD y las recargas que los usuarios pueden realizar desde sus teléfonos móviles para reducir la movilidad de las personas que se encuentran en lugares muy alejados de un punto de pago centralizado. La idea es extender la red de cada comunidad y agrupar las diferentes redes comunitarias en una más grande para poder canalizar una conexión de transporte con las universidades o proveedores de servicios de internet más cercanos. Finalmente, esperamos capacitar a una o dos personas de las comunidades para que puedan administrar la red para corregir daños menores que puedan ocurrir. Así, parte del pago que realizan los usuarios de la red comunitaria es también un ingreso para los administradores locales.